12 de noviembre de 2006


Cusco, Perú

Todos somos espectadores. Hay que observar para aprender. Darse vuelta para volver a mirar; y analizar, y pensar. Somos espectadores de nuestra vida y de la vida de los otros. Estamos donde tenemos que estar y cuando debemos, queramos o no, la diferencia es que sólo algunos aprovechan su condición. Si observamos y entendemos qué nos dice el mundo, tendremos la oportunidad de crecer, y de avanzar. Por eso, hay que estar atento a las señales.

1 comentario:

Hector Muñoz Tapia dijo...

Hay más señales de las que uno cree. De hecho, el mundo está lleno de ellas. ¿somos lo suficientemente despiertos para verlas? Para nada. Tarea pendiente de toda la vida...

De donde es la foto??

Saludos, Java!!!!